El diseñador italiano Giorgio Armani inauguró el 17 de febrero una supertienda en pleno centro de Manhattan, en la que convivirán sus diferentes marcas, en un evento que contó con la presencia de numerosas celebridades y aprovechó la ocasión de la "Fashion Week" de Manhattan.

Giorgio Armani en pleno centro de Manhattan

"Es un desafío apasionante, así describiría yo este nuevo concepto de tienda, Armani/5th Avenue, en Nueva York", dijo el empresario y diseñador italiano que emprende este nuevo negocio, en plena Quinta avenida, y en un momento en que el sector del lujo se está viendo impactando por la crisis global.

El creador admitió que su proyecto, en el que convivirán Armani Jeans, la colección para mujer Emporio Armani y los accesorios de la firma, así como productos cosméticos y ropa interior, "ha requerido cierto grado de valor".

"Estoy decidido a enviar un claro mensaje de cambio, interpretando las tendencias actuales unisex, con prendas en diferentes bandas de precios", indicó Armani, mediante un comunicado de prensa.

A la inauguración asistieron, entre otros, Victoria Beckham, Alicia Keys y Josh Hartnett.

El diseño interior de esa exclusiva supertienda, ubicada en un edificio de cuatro pisos con el exterior de cristal y que incluye un bar y un restaurante, estuvo a cargo de Doriana y Massimiliano Fuksas, y es el tercer proyecto de ambas partes desde la apertura de centros similares en Hong Kong y Tokio.

A la fiesta de Armani asistió el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, al igual que Caroline Kennedy y la novia del príncipe Alberto de Mónaco, Charlene Wittstock.

A ellos se unieron famosos hispanos como la actriz Elsa Pataky, la modelo Eugenia Silva, el torero Cayetano Rivera y el cantante Ricky Martin.

Entre las celebridades estadounidenses se dejaron ver los actores Liam Neeson, Robert de Niro, Mira Sorvino, Rachel Zoe y Milla Jovovich, el director Martin Scorsese, la modelo Natalia Vodianova y una de las más fieles compradoras de la marca, Victoria Beckham.

El empresario italiano ha hecho coincidir esa inauguración con la "Fashion Week" de Nueva York, un evento al que asisten numerosos famosos del mundo del cine y la canción estadounidenses.

Poco antes presentaron sus propuestas para el próximo otoño-invierno los diseñadores Max y Lubov Azria, con las que han querido "explorar la seducción etérea desde el lado ocuro", según sus notas a los estilistas.

Los Azria dedicaron buena parte de sus 35 modelos al negro, solo roto en unas cuantas ocasiones por los tonos mostaza, ciruela y blanco antiguo, además de la utilización en casi todas sus propuestas de leggings o mallas con cremalleras laterales, y botines con plataformas de altísimos tacones.

También presentó en Nueva York sus propuestas para la temporada que viene el diseñador de origen cubano Narciso Rodríguez, uno de los preferidos de la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, quien llevó uno de sus vestidos de primavera-verano 2009 al día siguiente de la elección de Barack Obama.

Rodríguez optó por el negro fundamentalmente y se fue a otros colores en profundo contraste como el amarillo limón y el rosa chicle, pasando por los blancos rotos y beiges, así como por los tejidos de camuflaje en blanco y negro con encajes superpuestos.

El diseñador de origen cubano optó, además como otros diseñadores en esta semana de la moda neoyorquina, por los pantalones pitillo y las faldas tubo de cintura alta, y en tornar una visión hacia los ochenta plasmada en la increíble vuelta de las hombreras.

Además, la firma holandesa G-Star Raw presentó sus propuestas de moda urbana en tejidos jeans para hombre y mujer con la colaboración del actor Benicio del Toro, quien al término de su desfile recitó la canción "Candidate" de la desaparecida banda británica Joe Division.

Sin más acompañamiento sonoro que un piano, esa firma presentó pantalones bombachos caídos y ajustados en el tobillo, y blazers entalladas con guiños a los cortes utilizados en hípica.

El negro y el azul marino fueron los protagonistas de una colección informal con el denominador común de abrigos amplios acompañados de capuchas y cuellos desmesurados,adornados ribetes, puños de lana y tonos metálicos, además del cuero, presente en pantalones y boleros. EFE

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(con fotografías y vídeo)