Barcelona, 14 feb (EFE).- Descubrir fibras de seda de araña cinco veces más resistentes que el acero, vestidos fabricados con cinta de casete reciclada, camisetas con microcápsulas hidratantes o sábanas regeneradoras que cicatrizan heridas son varias de las posibilidades que ofrece "Futurotextiles", exposición inaugurada hoy en Barcelona.

La exposición, que permanecerá en el Museo Marítimo de la capital catalana hasta el próximo 2 de abril, ha llegado a Barcelona de la mano de la Asociación de Colectividades Textiles Europeas (ACTE) y ha sido concebida por la comunidad metropolitana de Lille (Francia), cuyas industrias aportan el 80 por ciento del material expuesto.

La muestra incluye trece productos que proceden de centros tecnológicos y empresas catalanas, y otros dos del resto de España, lo que supone el otro 20 por ciento del material expuesto.

El visitante de esta exposición itinerante podrá contemplar nuevas fibras de bambú, soja, algas o acero inoxidable, además de seda de araña, "cinco veces más resistente que el acero y dos veces más elástica que el nylon", según destacan los organizadores.

También se exhiben tejidos a los que se aplica la "microencapsulación", consistente en depositar principios activos en minúsculas gotas que se activan generalmente por la fricción con la piel, y que pueden liberar perfumes, cosméticos o medicamentos, según sea su propósito.

En este sentido, el área "Medtex" muestra algunos de los avances en las aplicaciones médicas de los tejidos, como sábanas a base de fibra de quitina que ayuda a evitar infecciones y cicatriza heridas, pensada para personas que casi siempre están en cama, o piezas con sensores que visualizan datos médicos de los enfermos.

Entre los "cosmetotextiles" se puede contemplar una camiseta hidratante que disminuye la sensación de sequedad, o incluso ropa de cama con propiedades "energéticas" y hasta "afrodisíacas".

Otro de los ámbitos destacados de la exposición es el referente a los tejidos protectores -antifuego, antifrío o antichoque- y donde se puede contemplar el que sería el "mono de trabajo" del futuro, resistente a los accidentes y que lleva incorporada una pantalla comunicante.

El textil se puede aplicar a la "arquitectura de la urgencia", como demuestran unos refugios de nueva generación hechos con tejidos resistentes a las condiciones climáticas, funcionales y rápidos de montar, que han sido ampliamente utilizados en Haití tras el terremoto que asoló el país.

Entre otras curiosidades aparecen un moderno vestido fabricado con cinta de casete reciclada, obra de la artista Alyce Santoro, otro hecho con microfibras denominado Hairdress, a modo de melena gigante, diseñado por Ben Gregory, o un saco transpirable elaborado con tiras de espuma que permite echar una siesta en cualquier lugar de forma cómoda y "en la intimidad".

Tras su paso por Barcelona, "Futurotextiles" se podrá ver también durante este año en Córdoba, Prato (Italia) y Ronse (Bélgica). EFE