Arturo Obegero, Alled-Martinez y Oteyza: tres versiones del armario masculino con acento español

Por:

Triana Alonso

Publicado el
23 ene. 2022

El diseño español ha reafirmado su solidez con la presencia de hasta 3 firmas reconocidas en la agenda de la última Semana de la Moda masculina de París. Un trío de propuestas diversas que, no obstante, han compartido la frescura de los diseños, teñidos de pinceladas de inconfundible tradición o de irreverencia juvenil.

Este domingo 23 de enero, el creador asturiano Arturo Obegero ha vuelto a saltar al ruedo de las pasarelas con un íntimo desfile organizado en la planta inferior del 3537, el espacio impulsado por Dover Street Market, que en los últimos días ha albergado varías tiendas pop up o incluso una instalación efímera de Instagram. Ante un puñado de asistentes fieles a su joven marca y acompañada de un cuarteto de cuerda, la firma asentada en París propuso una fusión audiovisual a medio camino entre el cortometraje y el desfile al uso.

Violines y encaje de Calais en Arturo Obegero

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Titulada “Rue de Rome”, la colección propuso un vídeo en el que se mostró a los modelos en diversas escenas típicas de la vida parisina, del metro al café en terraza, en las que no faltó la presencia de unas notas chic de “Azabache”, el primer perfume de Arturo Obegero, presentado durante la última semana de la moda femenina junto al especialista de fragancias Pigmentarium. Tras un agitado paseo por la capital, los modelos fueron llegando a la rue des Francs-Bourgeois para asistir al desfile físico que tendría lugar minutos después.

Fiel a su estilo dramático y a sus reminiscencias del teatro y la danza, el creador convenció con una colección de una veintena de looks, más madura e imaginada alrededor del universo del violín. Entre telones escarlata, avanzaron, con la sensualidad que caracteriza a los shows del español, hombres y mujeres vestidos en sobrio negro, blanco y verde esmeralda. Pantalones de aperturas laterales y talle alto, en ocasiones de terciopelo, crearon siluetas propias del más elegante de los toreros. Chaquetillas cortas jugando con los volúmenes, extensiones de tejido simulando solemnes mantones, camisetas de punto y cuello de barco o torsos desnudos con aplicaciones de encaje negro y efecto de tatuaje para ellos; mientras que las mujeres presumieron de asimétricos vestidos de lencería vanguardista, provocadoras pezoneras o tocados de plumas. Mención especial para un vestido de cóctel para novia, la primera incursión formal de Obegero en el segmento bridal, el encaje de Calais que se apropió de detalles, escotes triangulares en espaldas o seleccionadas transparencias, como en una reinterpretación sensual de la tradicional mantilla española.

“Seguimos avanzando, poco a poco”, confesó en backstage Arturo Obegero, fundiéndose en abrazos y felicitaciones ante los aplausos de los invitados. Para el diseñador formado en las filas de Lanvin, que acaba de empezar a vender sus prendas en la plataforma Ssense y que trabaja en la instalación de su propio estudio parisino, este desfile ha sido, sin duda, un paso determinante para el paso a la etapa adulta de su proyecto.

Sportswear homoerótico, por Alled-Martinez

Solo unas horas más tarde, la planta subterránea del Palais de Tokyo acogió la presentación del diseñador barcelonés Alled-Martinez. A escasos pasos del salón Tranoï, celebrado también en el museo durante los últimos días, el creador formado en Central Saint-Martins propuso la proyección del cortometraje de presentación de la que es su sexta colección desde el lanzamiento de su firma homónima, dirigido por el creativo Pau Carrete. Titulada "Enfant Terrible", la propuesta del creativo, que dio sus primeros pasos en Givenchy y fue nominado al Premio LVMH en 2020, viajó hacia la nostalgia de los años 2000.

Inspirado por la estética homoerótica, el cortometraje idealizó los momentos de adolescencia en un colegio privado masculino, donde el descubrimiento sexual se fusionó con primeros planos de prendas de estilo deportivo. Un "dandy queer" vestido al estilo de los institutos americanos, para el que no faltan las camisetas de algodón de tirantes, los polos de manga larga a rayas, una sensual sobrecamisa denim de manga corta, shorts ligeros o un par de pantalones cargo en tonos beige y azul celeste. "Enfant Terrible" se convirtió en un logo hilo conductor, firmando hasta camisetas con reminiscencias de las equipaciones de baloncesto. También fue protagonista una entallada camiseta roja en la que solo aparecía una cruz blanca, emulando la bandera suiza.

Según explicaron desde la firma, el mensaje de la presentación híbrida no fue otro que enfatizar "a importancia de encontrar una comodidad temprana con las propias orientaciones sexuales, una necesidad vital que todavía está por conseguir con la ayuda de una sociedad comprensiva, acogedora y respetuosa, una realidad aún por lograr".

Oteyza renueva su estilo tradicional

Fundada por Paul García de Oteyza y Caterina Pañeda en 2012, Oteyza regresó a su cita con la Semana de la Moda de París el pasado jueves 20 de enero. Eso sí, únicamente en formato digital a través de un sugerente vídeo en el que imaginaron un desfile sobre un impoluto fondo blanco. Una puesta en escena minimalista que reforzó las líneas de sus siluetas depuradas, que avanzaron hacia un camino más comercial sin perder la esencia de su clásica sastrería española. Algo que, en cierto modo, también pareció el resultado lógico del trabajo conjunto con el grupo Perfumes y Diseño, que entró en el capital de la firma española en abril del año pasado.

Desde entonces, los objetivos de Oteyza han pasado por acercarse de forma más afirmada al streetwear, con looks más relajados o incluso la incorporación de sneakers a su oferta contemporánea, y ampliar su propuesta de prendas más "trendy" y sencillas para continuar abriendo sus horizontes internacionales bajo un posicionamiento de lujo urbano.

Titulada "Marinas", la colección para el próximo otoño/invierno busca su inspiración en el océano Atlántico, en las referencias pesqueras o en la obra del pintor abstracto Nicolas de Staël para dar lugar a prendas versátiles, de carácter flexible y fácilmente intercambiables. Haciendo uso de una paleta de color que incluyó tonos como el azul marino, el mostaza, el naranja o los habituales negros, grises y marrones, Oteyza propuso una reinterpretación moderna de sus clásicos abrigos y trajes de sastrería; además de capas con caperuza. Sombreros bob, botas de agua o bolsos tipo maletín destacaron entre los accesorios, mientras que la lana, el mohair, el merino, los algodones egipcios o el neopreno fueron los materiales con los que poner en valor la artesanía de la firma.

Premiada en 2021 con el galardón Madrid Capital de Moda, otorgado por el Ayuntamiento de Madrid, la marca mantiene su ambición de regresar a París con un desfile físico el próximo mes de junio.