Nueva York, 3 jun (EFE).- La firma estadounidense Calvin Klein y su diseñador Francisco Costa presentaron hoy en Nueva York un avance de su próxima colección de verano para 2010, en la que dominaron tejidos ricos como el organdí, el lino semitransparente, los tules o el nylon y las siluetas muy románticas.

Calvin Klein: verano 2009 - Foto: Pixelmania

La casa Calvin Klein, fiel al estricto minimalismo, dio a conocer las líneas generales de su colección femenina para el verano de 2010, presentando un total de veinticuatro modelos, una cifra muy similar a las que se suelen incluir en las habituales semanas de la moda de cada estación.

Costa, estadounidense de origen brasileño, dio preferencia en sus diseños a los tonos suaves, blancos, marfiles, beige o grises muy claros, en combinación con su clásico negro o el gris oscuro y uno que otro color teja, azules profundos o ligeros cítricos, y casi todos metalizados.

El diseñador de Calvin Klein, una firma que ya ha cumplido los cuarenta años en la industria de la moda, se decidió por mostrar una silueta romántica, en la que abundaron los vestidos, de escote barco y palabra de honor, vaporosos y de largo hasta por debajo de la rodilla.

Sus pantalones rectos con tops y camisolas, combinados con ligerísimas chaquetas o abrigos de verano, presentaron una imagen muy femenina y etérea.

Costa, además, se decidió por utilizar tejidos especiales y ricos por su textura pero ultraligeros como la organza, el organdí, los tules o el nylon, que le han permitido recurrir al uso de las capas y de los minidrapeados, que favorecen la figura femenina.

En los complementos, el diseñador estadounidense optó por presentar la mayoría de sus propuestas con zapato plano y semiabotinado, aunque no faltaron las plataformas, en pieles metalizadas.