Por
EFE
Publicado el
8 abr. 2014
Tiempo de lectura
3 minutos
Descargar
Descargar el artículo
Imprimir
Tamaño del texto

Cardin: "Por desgracia, la moda de hoy representa mundo en el que vivimos"

Por
EFE
Publicado el
8 abr. 2014

Madrid - Vitalista y contradictorio, Pierre Cardin atesora uno de los legados más eclécticos de la historia de la moda. Sus diseños futuristas revolucionaron la pasarela, y fue uno de los primeros grandes en abrazar el "prêt-à-porter", aunque hoy reconoce que no se siente "en el tiempo" que vive la calle y la pasarela.

Sobre si cree que la pasarela representa el momento en el que vivimos, el diseñador advierte en una entrevista con Efe que, "por desgracia, sí", y considera que, a pesar de su distanciamiento del mundo de la moda actual, esta es uno de las sectores fundamentales de la cultura.


Pierre Cardin
Pierre Cardin

"Si cierras los ojos, a través de la moda puedes ves pasar el tiempo. Sin moda, quién eres cuando estás desnudo", se pregunta el creador, que conserva su vitalidad intacta a los 92 años y ensalza el estilo como un componente intrínseco de la identidad del individuo.

"Quizás seas negro, blanco o chino, pero ¿de qué nacionalidad eres cuando estás desnudo? Es la ropa la que crea la nacionalidad", argumenta un Cardin que fue uno de los responsables en llevar la modernidad a la pasarela con diseños de líneas psicodélicas y coloridas y cuya primera línea de "prêt-à-porter" hizo correr ríos de tinta.

El atrevimiento de llevar el diseño al gran público le valió la expulsión de gremio de la alta costura francesa a pesar de que después fue readmitido, pero siempre ha hecho lo que ha querido dentro y fuera de la pasarela.

Cardin es uno de los grandes mitos de la alta costura, pero sus experiencias engloban desde los restaurantes -es propietario de la cadena Maxim's- o los hoteles hasta la producción teatral, una faceta de la que esta tarde dará una conferencia en el Instituto Francés de Madrid.

"No tengo complejos", sentencia el creador, alguien que domina como pocos el arte de los medios de comunicación y que, antes de comenzar la entrevista, inquiere: "¿Dé cuánto tiempo quieres las respuestas?".

Nacido Pietro Cardini en San Biagio Di Callalta, en la región italiana de Véneto, en 1922, el modisto reconoce que por el teatro siente "nostalgia", desde que era joven; de hecho, se metió en la moda como una "manera de ganar dinero" para poder así "pagar" sus cursos de teatro, ya que, cuando desembarcó en París, era solo "un refugiado de la guerra", rememora.

"Al principio quería ser actor y bailarín (...), pero también quería poder elegir los papeles de mi vida (profesional)", detalla el diseñador.

Comenzó en el negocio con Jeanne Paquín y Elsa Schiaparelli, dos de las casas más relevantes de la época, y luego llegaría su trabajo con Christian Dior (1945), pero en 1950 decidió que ya estaba preparado para abrir su propia firma de moda.

"Al conocer a tantos autores y escritores tuve la voluntad de existir por mí mismo", argumenta el diseñador.

La aventura no le ha salido nada mal. El emporio Pierre Cardin, que puso a la venta hace un par de años por la cifra de un billón de euros, aún sin comprador, aglutina cientos de licencias con su nombre, una línea de ropa en París, propiedades inmobiliarias, así como restaurantes, hoteles y el Espacio Pierre Cardin.

Este Espacio, que es escenario y centro artístico y se halla en el antiguo Théâtre des Ambassadeurs, lo compró hace cuatro décadas con el objetivo de difundir el trabajo de los talentos jóvenes del arte y del espectáculo. Por él han pasado estrellas como Marlene Dietrich, Jeanne Moreau, la española María Casares, Jean Cocteau, Juliette Greco o Dionne Warwick.

De la Dietrich le queda el recuerdo de "un ser muy particular" y, aunque "no era fácil trabajar con ella", cree que ella sentía adoración por él, relata Cardin, que cree que conocer a estos artistas de "tan joven" le valió para vivir la vida "con mucha soltura".

© EFE 2024. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los contenidos de los servicios de Efe, sin previo y expreso consentimiento de la Agencia EFE S.A.