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Diana León Banda
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6 jul. 2021
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Chanel medita sobre las musas y los museos para su Alta Costura

Traducido por
Diana León Banda
Publicado el
6 jul. 2021

La última colección de Alta Costura de Chanel, presentada en el Palais Galliera en una nublada mañana de martes en París, fue una novedosa meditación de la moda sobre las musas y los museos.

 


El Museo Galliera, uno de los más grandes de la moda en el planeta, es también una perla arquitectónica y un homenaje duradero a su propietaria, la duquesa Galliera. Nacida en el seno de una familia noble de Génova, se casó con gran riqueza y se convirtió en una notable filántropa, socialista y coleccionista de arte.
 
Gran parte de esta colección de Chanel fue un homenaje modernista a las obras de arte favoritas de la duquesa y a los archivos de moda del Museo Galliera. El museo posee más de 70 000 obras, entre las que se encuentran prendas de María Antonieta, la emperatriz Josefina y Audrey Hepburn, además de amplias colecciones de grandes casas francesas como Dior, Jacques Fath, Balmain, Givenchy, Poiret, Saint Laurent y la propia Chanel.

El elenco salió de la imponente puerta interior con altísimas columnas de piedra tallada y bajó la escalera principal con trajes de tweed bordados realmente elegantes, faldas cortadas primorosamente a la rodilla; y tops muy elegantes, bordados en tonos metálicos de paisley. La directora creativa de Chanel, Virginie Viard, también creó magníficas faldas tobilleras y encantadores abrigos de cuello alto en jacquard rosa.


Chanel Haute Couture - Otoño- Invierno 2021-2022 - Foto: Chanel - Photo: Chanel


Viard también jugó hábilmente con el ADN de la marca, renovando la clásica chaqueta de cuatro bolsillos de Chanel en un redingote de tweed brillante, emparejado con una falda más larga con bolsillos, y completado con sólo un sujetador negro debajo. Arriesgado sin ser grosero, un ejemplo del espíritu más juvenil que Viard ha traído a Chanel.
 
Acabado con un peinado aristocrático y vanguardista, un moño rematado trenzas africanas punk, presentado con humor. El vestido de seda rosa con cintura imperio era una maravilla, sobre todo porque se llevaba con unos pantalones bombachos que asomaban por debajo del dobladillo.
 
Al igual que la arquitectura de Galliera combina los diseños renacentistas, las líneas de la Belle Epoque y las técnicas de meta construcción de finales del siglo XIX, la colección mezclaba diferentes épocas y tiempos. La estructura inferior del edificio, de acero, es obra de Gustave Eiffel, cuya legendaria torre puede verse desde el jardín de la villa. Esto se recordaba con bandas de cinta negra en varios looks.
 
“En modo musa del museo. A menudo cantamos sobre los museos, pero no lo suficiente sobre las musas. Tal vez porque nos encontramos con ellas pocas veces. Pero cuando tenemos esa oportunidad", escribió crípticamente Viard en el programa del show, colocado en el asiento de cada invitado.  El Museo Galliera acoge actualmente la exitosa exposición Gabriel Chanel, Manifiesto de la Moda, que recorre sus primeros días abriendo su primera sombrerería en Deauville antes de la Primera Guerra Mundial; la invención del pequeño vestido negro en los locos años veinte y el desarrollo del perfume más famoso del mundo, Chanel Nº 5.


Chanel Haute Couture - Otoño- Invierno 2021-2022 - Foto: Chanel - Photo: Chanel


Presentada al aire libre en dos desfiles, cada uno de ellos para tan sólo 100 invitados, la colección fue también una sorprendente expresión de la rara destreza y el savoir-faire de los artesanos. La división Paraffection de Chanel ha abierto recientemente un nuevo e importante centro denominado 19M en el extremo noreste de París, en Porte Pantin, que agrupa y, en muchos sentidos, salva un patrimonio francés único: sus especialistas en modaque crean bordados, tejidos plisados, acabados de plumas, guantes de lujo, zapatos y sombreros. Como el impresionante top blanco en forma de pétalo plisado de hoy, sobre una fabulosa falda larga de plumas de marabú que era el epítome de la elegancia artística y con clase. Que, por supuesto, es el ADN clave de Chanel.
 
En una palabra, la auténtica alta costura de Chanel, en una época en la que la llegada de tantos nuevos modistos a París en los últimos años ha hecho que haya demasiada experimentación en la Alta Costura, y no suficiente gracia y refinamiento.
 
Como el vestido de novia de corte perfecto, con el que culminan todas las colecciones de alta costura. En este caso, un vestido de seda coral, endiabladamente sencillo, con los hombros al aire, con un velo rosa y un pequeño sombrero de copa. La novia se giró al final, en la escalinata del Museo Galliera, para lanzar su ramo por encima del hombro. La afortunada fue la editora estadounidense de InStyle, Laura Brown, que levantó la mayor ovación de toda la temporada en París.
 
Para su información, la editora australiana se comprometió con su novio de toda la vida a finales de 2019.

   
 

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