El cofundador de Guess deja la compañía acusado de abuso

El cofundador de Guess, Paul Marciano, que apartado de la sus funciones en la compañía de prêt-à-porter, Guess, el pasado mes de febrero tras haber sido acusado de agresión sexual, ha dimitido de sus funciones de presidente y dejará su puesto de responsable creativo a principios de 2019.

La decisión de Marciano, comunicada a través de un documento publicado este martes por la Comisión de bolsa de valores (SEC) americana, se ha hecho pública tras la presentación al consejo de administración de un informe sobre las acusaciones impuestas sobre el empresario franco-marroquí.

Según el documento, el comité, compuesto sobre todo por administradores independientes de Guess, no ha podido confirmar la certeza de abusos y agresión sexual. En ciertos casos, los investigadores han estimado que tanto la versión dada por la presunta víctima y la de Paul Marciano eran creíbles.

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Aunque la investigación no ha podido si Paul Marciano era o no culpable de acoso y agresión sexual, el grupo Guess y su cofundador han anunciado haber llegado a un acuerdo con cinco personas, a las que se ha indemnizado con 500 000 dólares en total.

El que contribuyera a la creación de Guess en Estados Unidos en 1981 ha también anunciado su dimisión como presidente del consejo de administración, aunque conservará el mandato de administrador. Será su hermano Maurice Marciano quien tome su relevo.

Paul Marciano dejará también su puesto de director creativo a finales de enero de 2019, tras un periodo de transición.

En una entrevista publicada a principios de febrero por la revista Time, la modelo Kate Upton acusó a Paul Marciano de acoso y de haberla forzado a contactos sexuales en varias ocasiones mientras posaba para las fotos de la marca en 2010. El entonces presidente calificó las acusaciones de “absolutamente falsas” y “absurdas” y ha asegurado no haber tocado jamás a Kate Upton “de manera inadecuada”.

El mundo de los creadores no se ha visto especialmente tocado por la hecatombe desencadenada tras el caso Weinstein y el movimiento #MeToo, a diferencia de los fotógrafos de moda, entre los que ha habido varios casos como Terry Richardson, Bruce Weber o Mario Testino.