BARCELONA - El pequeño comercio catalán prevé crecer entre un 2% y un 4% y facturar alrededor de los 850 millones de euros estas rebajas de invierno, que arrancan oficialmente este miércoles día 7 de enero.

No obstante, muchos establecimientos, especialmente de grandes marcas como Inditex, Mango o H&M, decidieron avanzarlas al pasado viernes día 2 amparándose en la ley estatal tras la suspensión de la catalana por parte del Tribunal Constitucional (TC).

Así lo han explicado este miércoles en rueda de prensa el secretario general de la Confederación de Comercio de Catalunya (CCC), Miquel Àngel Fraile, y el presidente del Gremio de Comercio Textil (GremiTex), Antoni Furest, que han sostenido que el gasto medio por persona oscilará entre los 80 y los 100 euros, y los descuentos de salida serán de entre el 30% y el 40% en sectores como la moda, complementos y equipamiento para el hogar.

Tanto Fraile como Furest han restado importancia al impacto de que diversos comercios adelantaran las rebajas, ya que lo han calificado de "residual", y han añadido que el 95% de los negocios han respetado el día 7 de enero como día de inicio oficial de la temporada.

   "Siempre hay un impacto, miedos e inseguridades cuando el local de al lado cuelga el cartel de rebajas", ha reconocido Furest, que ha agregado que la mayoría de comercios catalanes han realizado promociones interesantes durante los días previos de la campaña, si bien no han alcanzado rebajas tan potentes como las que el cliente puede encontrar a partir de este miércoles.

La normativa catalana prevé dos periodos de rebajas, del 7 de enero al 6 de marzo y del 1 de julio al 31 de agosto, si bien su suspensión por parte del TC tras admitir a trámite un recurso del Gobierno central permite a los comerciantes ampararse en la ley estatal, mucho más liberalizadora y que permite hacer rebajas en cualquier temporada del año.

"El 95% de las tiendas no tienen margen para estar todo el año con rebajas encubiertas. Sólo las grandes cadenas pueden permitirse este lujo", ha sotenido Furest, mientras que Fraile ha confiado en que el TC no suspenda definitivamente la ley catalana.

"Confiamos en que el TC levante la suspensión de la normativa catalana porque si entra en el fondo del tema, más allá de temas políticos, no tiene sentido alegar que rompe la unidad de mercado", ha considerado Fraile, que ha defendido que también en Europa cada país establece su normativa propia.

Asimismo, ambos han mostrado su preocupación por el efecto de confusión que ha conllevado ante el consumidor que los comercios hayan tenido la posibilidad este año de respetar la ley catalana o de ampararse en la estatal, ya que el cliente no sabe con certeza cuándo se inician las rebajas, si bien Fraile ha mantenido que el día 7 "es una fecha mágica del calendario comercial" que será muy difícil de sustituir.

CAMPAÑA DE NAVIDAD

   En cuanto a la campaña de Navidad, se preveía que estas fiestas fueran las mejores en ventas para el comercio de los últimos siete años, con un incremento de entre un 2% y un 4%, y finalmente la realidad se ha materializado en las previsiones más conservadoras.

Así, mientras el número de visitas sí que ha aumentado un 4%, el incremento de la facturación se ha situado en un 2%, debido a que los clientes han crecido pero el importe del tique de compra ha sido más reducido.

El pequeño comercio catalán, que emplea a 323.000 trabajadores, ha contratado este año a 6.000 personas para hacer frente al repunte de la demanda que se esperaba en la campaña de Navidad, y según Fraile se prevé mantener esta cifra durante la campaña de rebajas de invierno.