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3 nov. 2021
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Frolov, couture-to-wear de Kiev a los escenarios de estrellas del pop

Publicado el
3 nov. 2021

Un realista corazón de neón preside la pared de la sede de Frolov, iluminando sus escaleras del rojo escarlata que caracteriza a la firma. Un estudio-atelier de dos plantas de estilo minimalista e industrial, situado junto a una zona arbolada en pleno Kiev, en el que se gestan los diseños de Ivan Frolov. Un joven talento ucraniano que, desde la creación de su propia firma de couture-to-wear en 2012, ha seducido con sus provocadoras y sensuales reinterpretaciones contemporáneas de la corsetería a celebridades como Dua Lipa, Rita Ora, Demi Lovato, Gwen Stefani o Milla Jovovich. Con un decorado de telones carmín y bodegones de granadas frescas y champagne sobre sábanas doradas para la ocasión de la celebración de los “Kyiv Art & Fashion Days”, celebrados en la capital ucraniana entre el 7 y el 10 de octubre, nos adentramos en las bambalinas de la marca.


Colección "Azucar" - Frolov


“Frolov nació conmigo. Desde que tengo uso de razón, siempre he querido ser diseñador. Dibujaba mis primeros sketches incluso antes de saber escribir”, cuenta Ivan Frolov sobre los inicios de su proyecto, impulsado sin el apoyo de inversores con la ayuda de amigos y la autofinanciación para las primeras colecciones. Casi una década después de sus primeros pasos, la situación ha cambiado. Con una plantilla fija de 35 empleados, Frolov cuenta con puntos de venta para comercializar sus sensuales diseños en un total de 12 países, tales como su mercado local Ucrania, donde se encuentra su tienda propia en Kiev; así como Francia, Hong Kong, Reino Unido, Alemania, Emiratos Árabes, Kuwait o Bielorrusia. En términos de estrategia, para el creador, las principales regiones para el desarrollo de su actividad son Estados Unidos, Europa y Oriente Medio. 

Un crecimiento que Frolov pretende apoyar mediante una futura presentación en la Haute Couture de París y en el desarrollo de nuevas categorías de producto como calzado y accesorios. Asimismo, se anuncia fundamental el impulso internacional de la venta online, que actualmente únicamente representa un 5 % de la facturación de la marca gracias a las operaciones de su propia boutique en línea y de su presencia en plataformas como Browns y Farfetch.


Colección "Love Airlines" - Frolov



Y es que el modelo de negocio de la firma, que no revela sus resultados financieros, se basa en la customización detallada al gusto del cliente y la personalización individualizada. “Es una de las características clave de la marca, ya que queremos que las prendas sienten perfectamente a todo aquel que las luzca”, explica el creativo. Así, un 60 % de las ventas de Frolov, tanto online como offline responde a pedidos a medida, que en numerosas ocasiones acaban formando parte de las colecciones privadas y fittings de artistas y celebridades.

Con un posicionamiento de precios premium, que parte desde 40 euros algunos accesorios hasta 5130 algunos diseños de ready-to-wear, Ivan Frolov no pone límites de presupuesto a sus piezas “couture”. Un trabajo metódico y artesanal que se refleja, incluso un soleado sábado por la mañana, en el perfeccionismo de los empleados de su taller, concentrados en la elaboración de sus bordados de corazones, de detalles de pedrería dorada, de acabados de cristales sobre corsés semitransparentes o copas rígidas de sujetadores. ¿El resultado? Minivestidos sugerentes, blazers estructurados o lencería festiva, creados a partir de tejidos italianos, belgas o franceses, así como de cristales checos. Sin ir más lejos, un imponente vestido de cristales bordados capta todas las miradas. Para su compleja confección, Ivan Frolov nos cuenta que fue necesario el trabajo de 5 especialistas artesanos y hasta 520 metros de cadenas de cristal.


Ivan Frolov, director creativo de Frolov - Frolov



Completan las propuestas de la firma una línea nupcial y Stud, una propuesta unisex con la que apelan a un cliente “sin género ni edad”, siguiendo las ambiciones del diseñador de que sus prendas permitan “expresarse de un modo único, experimentando, empoderando la sexualidad y tratando a los looks no como prendas de ropa sino como declaraciones de intenciones”. Sobre su mediatismo en el extranjero al alza, Ivan Frolov bromea. “En Ucrania se dice que para triunfar aquí primero tienes que ser popular en el extranjero”, ríe, reconociendo que la tendencia ahora está cambiando. “El apoyo local ha cambiado y los ucranianos no solo han empezado a llevar nuestras marcas sino a estar orgullosos de ellas”, concluye.

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