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Karl Lagerfeld lleva la Alta Costura de Chanel al sur, pero no sale a saludar
Mientras París estaba sumergida en la nieve, Chanel trasladó a un soleado escenario Mediterráneo su último show de Alta Costura dentro del Grand Palais donde, para gran sorpresa de todos, Karl Lagerfeld, por primera vez desde que se pueda recordar, no salió a saludar.
En cambio, de pie ante un mural gigante de una villa toscana, su mano derecha, Virginie Viard, recibió el aplauso de unas 600 personas asistentes al show, junto a la modelo italiana de ojos verdes de 20 años, Vittoria Ceretti, que llevaba un brillante bañador plateado con un gorro y velo a juego. Esther Williams con estilo y ritmo.
Unos segundos después del pasaje final de todo el reparto, Michel Gaubert, el DJ que ha estado en los shows de Lagerfeld durante las últimas décadas, tomó el micrófono.
“Damas y caballeros, unos segundos de su atención, por favor. Como habrán notado, Monsieur Lagerfeld le pidió hoy a Virginie Viard, como directora del estudio creativo, que lo representara al final de esta magnífica colección inspirada en el siglo XVIII. Esperaremos a Monsieur Lagerfeld para el segundo show. Gracias por su atención, ahora les pediré que hagan sitio para que nuestros equipos preparen el próximo show. Esperamos que pasen un buen día”, anunció Gaubert primero en inglés y luego en francés.
Chanel, dependiendo del tamaño del espacio, a menudo organiza dos espectáculos de Alta Costura, tradicionalmente los martes por la mañana, uno a las 10 y otro a las 12.
Tras el show, la histórica marca francesa publicó un comunicado sobre la ausencia del diseñador.
“Para el saludo tradicional al final del show, el señor Lagerfeld, director artístico de Chanel, que se sentía hoy cansado, le pidió a Virginie Viard, directora del estudio creativo de la casa, que lo representara y saludara a los invitados junto con la novia. Virginie Viard como directora del estudio creativo y Eric Pfrunder como director de imagen de Chanel continúan trabajando con él y siguen con las colecciones de la marca y campañas de imagen", detalló el documento.
Organizado en un maravilloso jardín formal, con una piscina de piedra neoclásica, céspedes recortados y pinos y palmeras mediterráneos, la acción empezó con la última versión del traje Chanel, esta temporada en un bucle de lana a cuadros, cortada en una falda extendida, con apertura por un lado y terminó con solapas invertidas y los hombros escotados de las cortesanas georgianas.
Para la noche, Lagerfeld puso unos vestidos de seda bellamente curvilíneos, ajustados en la cintura y que se ensanchaban hasta debajo de la rodilla, con enaguas florales debajo. Todas con un estilo muy de María Antonieta moderna.
El modisto alemán varió el ritmo, de repente sorprendió con una tremenda falda blanca de plumas de marabú rematada por chaquetas negras de motorista cruzadas. Luego, inmediatamente, invirtió el siguiente look con un fantástico bolero con plumas sobre una falda de lápiz de cuero. La seguridad y destreza llamativa por todas partes.
El elenco, deliciosamente refinado con el pelo peinado verticalmente hasta seis pulgadas como una princesa de Versalles y con unos preciosos pendientes. La banda sonora era una música animada desde Henry Mancini hasta el final con el clásico del icono del pop Dalida, 'Parole, Parole.' Todo fluido y refinado, hasta la repentina sacudida del anuncio. Lo que, francamente, planteaba más preguntas de las que respondía.
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