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Rocío ALONSO LOPEZ
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29 jul. 2021
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L'Occitane elige la agroecología para la producción de sus ingredientes estrella

Traducido por
Rocío ALONSO LOPEZ
Publicado el
29 jul. 2021

El peso pesado en el mundo de la cosmética, el grupo L’Occitane, que agrupa a seis marcas de belleza, incluyendo L’Occitane en Provence, Erborian y Melvita, emplea a más de 9000 personas en todo el mundo. Entre ellos, Jean-Charles Lhommet. Este agrónomo dirige desde hace seis años el departamento de biodiversidad y sectores sostenibles del grupo L'Occitane, en el que trabajan otros nueve ingenieros afincados entre Francia y Burkina Faso. ¿Su principal misión? Desarrollar y asegurar las cadenas de suministro de los ingredientes naturales principales de L'Occitane, como el karité producido en Burkina Faso, la siempreviva de Córcega y las almendras, la verbena y la lavanda que florecen en el sur de Francia.


Magalie y Philippe Mary, socios del grupo L'Occitane en su campo de verbenas - DR


Mucho más acostumbrado a los grandes espacios que a las oficinas, este equipo trabaja para asegurar el suministro de ingredientes trabajando junto a los productores socios del grupo y apoyándoles en su transición ecológica. Todo ello apoyándose en los principios de la agroecología.

Esta práctica, que tiene como objetivo promover sistemas agrícolas que respeten a las personas y el medio ambiente, es lo que están haciendo en Provenza. Desde 2016, Magalie y Philippe Mary, una pareja de agricultores que viven en Jouques, cerca de Aix-en-Provence, trabajan con L'Occitane, al cual suministran verbena.

Esta verbena, cultivada de forma ecológica en un entorno natural certificado Natura 2000 por la red europea para la conservación de la biodiversidad, es recolectada dos veces al año, a finales de agosto y a finales de octubre. Todas las 7000 toneladas producidas son vendidas luego al grupo L'Occitane para convertirse en el ingrediente estrella de los geles de ducha, cremas de manos e incluso perfumes, que son productos vendidos en todo el mundo.

"Vender nuestra verbena al grupo L'Occitane incluso antes de su producción es muy tranquilizador para nosotros", dijo Magalie Mary, quien también tiene una casa de huéspedes con su marido.

Para lograr tal asociación, L'Occitane propuso y apoyó un "diagnóstico de biodiversidad" en 2018. Este estudio, cuyo coste ronda los 10 000 euros, destacó la presencia de especies protegidas de flora y fauna que habitan en las tierras de los Mary, pero también permitió proponer métodos de agricultura ecológica como los cultivos de cobertura.



Jean-Pierre Jaubert y sus almendras - Sylvain Duffard


Instaladas entre cultivos permanentes o en zonas habitualmente en barbecho, estas cubiertas vegetales elegidas según el tipo de suelo o el entorno mejoran la fertilidad sobre todo gracias al nitrógeno y permiten un mejor control de plagas y enfermedades.

"Podemos seguir destruyendo la naturaleza incluso haciendo cosas orgánicas, por lo que tenemos que ir más allá, aunque esto a veces tenga un coste. El establecimiento de cubiertas vegetales requiere la compra de plántulas particulares e incluso máquinas", explicpo Philippe Mary, presidente de “Agroécologie et Commerce Equitable”, una asociación formada por una quincena de agricultores, respaldada por los equipos de L'Occitane.

Proveniente de tres generaciones de agricultores establecidos en la meseta de Valensole, Jean-Pierre Jaubert se hizo cargo de la finca de sus padres en 1979 con el deseo de asumir un desafío: reactivar el cultivo de almendros. La apuesta tuvo éxito ya que con sus 17 000 árboles plantados, Jean-Pierre Jaubert, también al frente de una empresa de obras públicas que acaba de vender, es el principal proveedor de almendras de L'Occitane y uno de los mayores productores de Francia.

Jean-Pierre Jaubert, que trabaja con L'Occitane desde hace veinte años, se centró rápidamente en las prácticas agrícolas sostenibles. Aunque no practica la agricultura ecológica debido a la presencia de una mosca particularmente aficionada a las almendras, utiliza abonos orgánicos, además, ha instalado un recipiente de recogida de agua de lluvia o incluso cientos de colmenas alrededor de sus árboles.

Desde hace casi dos años, también se ha embarcado en la agroecología, optando paulatinamente por la cobertura vegetal. "Con la agroecología, el rendimiento por árbol es menor pero la calidad de la almendra ha mejorado considerablemente y los almendros son más resistentes al calor y las enfermedades", explicó Jean-Pierre Jaubert.

Para proteger esta almendra de Provenza, que se enfrenta a una gran competencia con la de Estados Unidos, el grupo L'Occitane participó en 2018 en la creación de la asociación interprofesional France Amande.



Campos de lavanda con cobertura vegetal en un cultivo intercalado. - DR


L'Occitane también está haciendo este trabajo para una mejor regeneración de los suelos y la biodiversidad con los productores de un producto estrella de la Provenza, la lavanda. El grupo participa en el programa "Green & Lavandes", cuyo objetivo es adaptar los métodos de producción a las cuestiones medioambientales. La fisonomía de estos campos, muy frecuentados por turistas y fotógrafos aficionados, también está cambiando paulatinamente. Entre los cultivos de lavanda con miles tonalidades de violeta, también aparecen tonalidades de verde.

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