Madrid - La moda peruana ha llegado este lunes a la pasarela madrileña con un desfile de las diseñadoras Meche Correa, Jessica Butrich y Sitka Semsch, tres propuestas muy diferentes que han plasmado desde la tradición de la artesanía a las tendencias más pop en la última jornada de la Mercedes Benz Madrid Fashion Week.

La 58 edición de la pasarela madrileña, que dará este martes paso a los jóvenes creadores emergentes en la plataforma EGO, ha abierto este año por primera vez sus puertas a Latinoamérica con Perú como país invitado.

Meche Correa, diseñadora y artista, ha basado su colección en el arte y la cultura peruana que ha acercado a la moda contemporánea a través de telas pintadas a mano en encajes y bordados sobre transparencias de tul y organza para faldas y vestidos.

Correa ha confesado en una entrevista con Efe Estilo que no sigue las tendencias sino que el arte peruano es el "alma y corazón" de sus diseños de tal forma que recrea la pintura de la escuela cuzqueña y la influencia española en su país.

Jessica Butrich ha traído a Madrid una colección muy juvenil con dibujos gráficos pop de frutas y corazones en la que han destacado los complementos y accesorios que también diseña esta creadora.

Su colección "Amor imposible" utiliza la combinación del blanco y negro y el celeste para recordar el frío y los colores que llegan hacia el rojo para el calor.

Inspirada en el vestuario utilizado en la sierra peruana, Sitka Semcsch ha mostrado una colección de ropa que pueda vestirse fuera de la pasarela en colores tierra y de piezas superpuestas realizadas en algodón, lino y seda.

En la pasarela madrileña se han visto prendas versátiles en las que los nuevos tejidos aportan la novedad. Propuestas muy prácticas de jóvenes modistos, alguno de ellos de reciente incorporación a la pasarela madrileña, como Moisés Nieto, o de estreno, como ha sido el caso de Juan Vidal, que ha ganado además el premio L'Oreal a la mejor colección.

Una colección que Juan Vidal ha dedicado a la escritora Marguerite Duras y a la actriz de los años 60 Sylvia Kristel, según ha relatado a Efe Estilo el diseñador, que ha destacado también los toques asiáticos influenciados por el cineasta Wong Kar Wai.

El rosa ha sido el color estrella de esta colección en la que ha destacado la sensualidad y el hedonismo, un canto a las "lolitas".

Las telas se transforman y, junto a las tradicionales, han hecho acto de presencia tejidos nuevos surgidos de la investigación.

Una de sus más firmes defensoras es la firma Martin Lamothe, que ha desarrollado una serie de tejidos a través de unos procesos denominados laminado, plastisolado, resinado y anacarado con el que ha querido plasmar efectos de mojado y goteo en algodones, organzas, sedas y napas en su colección "Water Olympics", ha explicado a Efe Estilo la diseñadora Elena Martín.

Sara Coleman ha utilizado en la colección presentada hoy "Organic Design" tejidos creados a partir del reciclado de botellas, de tal forma que la tecnología y lo natural se combinan para dar paso a una serie de prendas "básicas y comerciales y a la vez muy versátiles".

"Hemos apostado más por el tema comercial que por la creatividad", ha reconocido Sara Coleman, que ha mantenido el color azul marino como base de la colección y ha combinado morados con amarillos y verdes.

Sita Murt ha investigado también su básico, el punto, y ha mezclado algodones y linos naturales con hilos de poliamida y poliester para conseguir unas texturas consistentes, como el nido de abeja tridimensional.

Moisés Nieto que ha querido vestir a una mujer "fuerte, viva y muy femenina", inspirada en su madre y la moda de los años 70 con prendas básicas y prácticas que huyen de la "moda basura".

Más atrevida, María Escoté ha recreado el vestuario de las bailarinas de barra con prendas de corte "muy sexy" aunque comerciales, en ocasiones estampada y en otras realizadas con malla metálica.

Mientras, la colección "After" de Carlos Díez ha estado centrada en el negro salpicado de amarillo inspirado en el logotipo de "smiley", la sonriente cara amarilla de la felicidad.

La semana de la moda de Madrid se ha abierto este lunes a Iberoamérica, una de las novedades de la 58 edición, con Perú como país invitado, con un desfile de las diseñadoras Meche Correa, Sitka Semsch y Jessica Butrich, que han presentado tres propuestas muy diferentes.

La jornada se ha cerrado con la moda de baño para el próximo verano de las diseñadoras Montse Bassons y Dolores Cortés.

La primera se ha inspirado en el continente africano para crear biquinis, bañadores y triquinis con estampados florales y de animales salvajes como jirafa, cebra y leopardo, mientras que la segunda ha viajado a Oriente para ofrecer prendas drapeadas en tonalidades fresas, verdes y violetas.