Por:
Bruno Joly
Bruno Joly
Publicado el
11 abr. 2012
11 abr. 2012
Perspectivas sobre China: “A los productores chinos tal vez les falta confianza en ellos mismos”
Por:
Bruno Joly
Bruno Joly
Publicado el
11 abr. 2012
11 abr. 2012
La Fashion Week de Pekín empezó el pasado sábado 24 de marzo y el salón Chic festeja su vigésimo aniversario. FashionMag aprovecha esta ocasión para presentar la serie “Perspectivas sobre China”. Esta vez se trata de Gabriel Torres, responsable de los contenidos académicos de la escuela barcelonesa Escuala Superior de Diseno y Moda Felicidad Duce, y miembro desde hace 18 años del jurado del Hempel Award de Pekín, en donde se selecciona entre 32 finalistas a los mejores jóvenes diseñadores; nos comparte sus impresiones.
Gabriel Torres |
FashionMag.com: ¿Cómo ha evolucionado la creación en China?
Gabriel Torres: En 18 años, los estudiantes chinos han aprendido una gran cantidad de cosas a una velocidad increíble. Ellos son cada vez mejores, lo que se evidencia en las colecciones presentadas en la competencia. Los chinos dan prueba de su gran paciencia y de su fuerte capacidad de concentración en el trabajo.
FM: ¿Pero cuál es su lugar en el mundo?
GT: China también es un país productor. Todavía es un poco temprano para encontrar marcas o diseñadores que tengan reconocimiento a nivel mundial. Todavía se observa demasiado a Occidente. Ahora bien, yo creo que podría haber una moda china para todo el mundo. El problema, tal vez, es que les falta confianza en ellos mismos. Hoy en día hay creadores que tienen un aura en China; pero no a nivel internacional todavía. Yo pienso que en diez años ya habrán logrado el objetivo.
FM: ¿Qué lugar le otorgan a China sus estudiantes españoles?
GT: Para nuestros estudiantes, si participan en el concurso, normalmente es la primera ocasión de visitar Pekín. Algunos estudiantes que trabajan en Inditex o Mango, visitan la ciudad para asegurar el control de calidad. Nosotros intentamos hacerles prestar atención a China, a sus marcas y a sus industriales. No obstante, cuando los estudiantes están comenzando, sueñan con Tokio, Milán o París; a pesar de que la competencia sea a nivel mundial.