Phoebe Philo podría ser la sucesora de Bailey en Burberry

La noticia del momento es la marcha de Christopher Bailey de su puesto como director artístico de Burberry. La información, que ha cogido por sorpresa a todos, no ha dejado de llenarse de especulaciones sobre quién será el sucesor del diseñador. Pocos minutos después del anuncio, el nombre de Phoebe Philo ya estaba en boca de todos como posible sucesora de Bailey en la dirección artística de Burberry.

Su nombramiento la permitiría trabajar de nuevo junto a Marco Gobbetti, CEO de Burberry y anterior director general de Céline en París, donde Phoebe Philo dirige la creación desde hace nueve años desde su estudio londinense.

Oficialmente, Marco Gobbetti comenzará la búsqueda del sucesor de Christopher Bailey esta semana. El ejecutivo se unió a Burberry el pasado mes de julio, después de haber esperado 12 meses a que su preaviso en Céline terminase. Ciertos periodistas prefieren apostar por el compatriota de Philo, Jonathan Anderson, que ha recibido críticas particularmente entusiastas por su trabajo en Loewe.

Pase lo que pase, Christopher Bailey deja Burberry tras un reinado remarcable. Poniendo las cosas en perspectiva, bajo la dirección de Bailey, la facturación anual de Burberry ha crecido hasta los 2.778 millones de libras (3.166 millones de euros) durante los últimos ejercicios financieros, el doble de la cifra de ventas de hace seis años. Burberry es la única marca británica verdaderamente internacional, al nivel de Giorgio Armani, Chanel o Christian Dior. La firma pasa por encima del resto de marcas inglesas, hasta el punto de que su recaudación anual equivale a la cifra de ventas de todas las demás marcas británicas que participan en la Semana de la Moda de Londres juntas.

Bajo la dirección de Christopher Bailey, Burberry ha logrado afianzar su dominación en el ámbito digital. La única torpeza ha sido, quizás, su estrategia “see now, buy now” (que consiste en poner a la venta las colecciones inmediatamente después de su presentación), que se plantea problemática y negativa para la creatividad de la marca, a pesar de la predicción de numerosos expertos que la valoraban como el nuevo modelo comercial. Sea como sea, el último desfile de Christopher Bailey para Burberry fue uno de los mejores de los últimos años.

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