Madrid, 8 feb (EFE).- El negro ya no es "el color", como tampoco es la camiseta la prenda estrella, ni la comodidad la consigna: la fiesta de los Goya se ha contagiado de la magia del cine y los diseñadores españoles se han conjurado de nuevo este año para vestir a actores y actrices con sus modelazos, eso sí, prestados.

Lo que no se presta, sino que se regala, son los zapatos. La Federación de Industrias del Calzado Español (FICE) ha vuelto a ofrecer este año modelos de 23 creadores para que los actores pisen el domingo con ellos la alfombra roja y, en agradecimiento por elegirles, han decidido obsequiarles en esta ocasión con el par que calcen.

Además, también por primera vez, han montado una exposición con sus creaciones en la Academia de Cine, donde está instalado desde hace tres semanas el "showroom" en el que candidatos, presentadores y actores invitados podrán escoger la ropa y el calzado hasta el miércoles, día en el que se trasladarán a la sede de la gala, el Palacio Municipal de Exposiciones y Congresos.

En esta muestra, abierta al público hasta el día 19, puede apreciarse que la tendencia es, para ellas, "de altura", con plataformas vertiginosas, muchas en color rojo, y, para ellos, de estilosos escarpines violetas o negros en terciopelo.

La portavoz de FICE, Rosa Bonmatí, explica a Efe que este año han querido "formalizar" con un acuerdo estable su colaboración con la Academia de Cine y que, a partir de ahora, los fabricantes aportarán sus creaciones para distintos eventos, no sólo para los Goya.

"Queremos lograr una promoción de la industria del calzado aliados con otra tan potente y, sobre todo, con tanta proyección como es la del cine", añade Bonmatí.

El estilista de la gala, Vicente Ruiz, detalla en declaraciones a Efe que ya han "vestido" para la ceremonia del domingo a una veintena de actores y actrices con modelos que han aportado 19 creadores españoles, de Roberto Torretta a Lydia Delgado pasando por Amaya Arzuaga, Ángel Schlesser o Vittorio y Luchino.

Está empeñado en que el negro deje de ser "el color" para ellas, "porque además es antitelevisivo", y parece que lo está logrando pero, por contra, le encantaría que ese fuera el tono que predominara para ellos, ya que eso significaría "smoking y trajes de etiqueta", "es decir, lo que se merece una fiesta de cine".

La preocupación por si los trajes que ahora cuelgan de las perchas serán de la talla de su posible portador, es irrelevante, porque, presumen, en sólo un par de días pueden ajustar "como un guante" cualquier modelo.

En definitiva, todo el que quiera puede ir perfectamente vestido, calzado y, además, enjoyado, porque la firma Carrera y Carrera les proporciona, que no regala, sus alhajas.

Concha Barrigós.