T.ba, espíritu ecuestre para una moda internacional

Por:

Eva Gracia Morales

Publicado el
15 ene. 2020

En 1999, Mercedes López de Carrizosa y su hermana fundaron T.ba, una firma de ropa femenina de campo de estilo hípico. La marca nació de una necesidad, pues ellas, para actividades como montar a caballo, vestían la ropa de sus hermanos, así que encontraron ahí un nicho de mercado. Hoy, T.ba es más que una marca funcional y campestre: más enfocada a la moda que en sus inicios, cuenta con colecciones para invierno y verano, tres tiendas (una en Madrid y dos en Londres) y una facturación anual de 5 millones de euros.

En el proceso de transformación de T.ba hubo un punto de inflexión, el año 2011. “Entonces se abrió la primera tienda, en la calle Lagasca de Madrid, se apostó por buscar el ‘total look’ de la marca, se informatizó y reorganizó la empresa, se fijaron los objetivos de diseñar colecciones de verano, de crecer y de expandirse”, explica a FashionNetwork.com Gonzalo Prado, CEO de T.ba, firma a la que se incorporó en ese año crucial.

“Fue una transformación muy interesante. Cuando tienes una tienda propia, tienes información directa del cliente y eso nos permitió afianzar nuestra personalidad. Ahora somos nosotros los que recomendamos en la venta al por mayor lo que funciona en tienda”, valora Prado.

La propuesta de T.ba en lo que a diseño respecta es prácticamente una fabricación a medida. “Presentamos los tejidos y modelos y los clientes eligen qué modelo quieren en cada tejido”, detalla. “Fabricamos colecciones diferentes para wholesale y para el cliente directo. Damos, igual que nuestros clientes, mucha importancia al patronaje. Y lo diseñamos todo nosotros: tejidos, botones, forros… queremos que sea algo especial”, ahonda Prado.

Aunque, actualmente, su catálogo es más amplio que en sus inicios, T.ba mantiene el espíritu con el que nació, muy ligado al campo y a la naturaleza. El resultado es un aire algo folk, pero con un halo de exclusividad envolviendo cada pieza. “El 90 % de nuestros clientes buscan moda. Eso sí, las chaquetas (piezas que rondan los 300 euros) siguen siendo nuestro ‘Big Mac’”, comenta el CEO de la compañía.

T.ba fabrica en un tallaje de la 36 a la 50 y está, en las últimas temporadas, tratando de potenciar su línea de invitada, un nicho en auge, y su producto es 100 % made in Spain. “Viendo los parámetros de la sostenibilidad, cumplimos varias características: fabricamos localmente, nuestra ropa está hecha para durar e incluso para heredar y ponemos nombre y apellidos a todos los que participan en el proceso de fabricación”, indica Gonzalo Prado.

Estados Unidos y Reino Unido, mercados fundamentales

T.ba reparte sus ventas, prácticamente al 50 %, entre el canal wholesale y la venta directa a través de sus espacios físicos. En la distribución al por mayor, cuenta con 135 puntos de venta repartidos por 22 países, pero son Estados Unidos y Reino Unido los que concentran el grueso de las operaciones. Precisamente en la capital del Reino Unido es donde la marca cuenta con dos tiendas propias: en 2014 se instaló en el barrio de Chelsea; en 2017, en Mayfair. “Ambas están funcionando muy bien”, subraya Prado, que apunta que la marca se dirige a una clienta “internacional y cosmopolita”. 

A los citados puntos de venta en Londres se suman los tres con los que T.ba opera en España: una tienda propia en la calle Lagasca de Madrid y dos corners en El Corte Inglés, en los centros de Serrano y Castellana, ambos en la capital. En el mercado nacional, la firma también trabaja en el canal wholesale, si bien este supone únicamente el 15 % de las ventas.

En plena era digital, ¿qué hay del e-commerce? “Hace unos seis meses lanzamos la tienda online en Reino Unido. Lo hicimos ahí porque, al tener dos tiendas, nos da más visibilidad. Tenemos que ver cómo lo trabajamos para no perjudicar a nuestros clientes multimarca, aunque, al final, los dos mundos tendrán que cruzarse”, valora el CEO de la marca.

Ambiciones internacionales

De marcada voluntad internacional, T.ba participará en la próxima edición de la feria Who’s Next de París, que tendrá lugar del 17 al 20 de enero. “Apostamos por París desde hace 16 años. Es una feria interesante porque hay clientes a los que siempre vemos ahí, pero echamos de menos captar clientes nuevos en el salón y nos encantaría que tuvieran la capacidad de convocar a grandes almacenes”, explica Prado.

“Desde hace dos años, solo vamos con las colecciones de invierno. Debería ser la feria de referencia de Europa; lo fue hace un tiempo, pero no ha conseguido recuperar su sitio. También ocurre que las ferias y el sector están cambiando, los clientes al por mayor no siempre saben dónde comprar”, añade.

Además de en Who’s Next, T.ba participa anualmente en cuatro ferias en Estados Unidos (en Las Vegas y Nueva York, en las temporadas de invierno y verano), en un salón de caza en Nuremberg y en la feria de moda de Salzburgo.

Para 2020, los planes de la marca pasan por seguir potenciando su negocio internacional. “Estamos buscando posibles socios estratégicos para ampliar nuestra presencia en México y Estados Unidos. Tenemos mucho por desarrollar en América”, concluye el CEO de la firma.

T.ba, que se integró en el Círculo Fortuny (una asociación que agrupa a marcas culturales y creativas españolas de prestigio) hace año y medio, tiene su sede en Madrid, donde cuenta también con un showroom. Da empleo a 39 personas y, aunque cerrará su ejercicio en febrero, espera concluir el año fiscal con una facturación de 5 millones de euros.